Equipo Azúcar

Marta López Dietista-Nutricionista nº col ARA00232

El otro día uno de los programas que suelo ver en televisión, Equipo de Investigación, trató del azúcar oculto en los alimentos, tema de actual debate. Hablaron de su presencia en un montón de alimentos (la mayoría de los cuales la población los desconoce), del consumo de azúcar en familias españolas y de los efectos que causa en el organismo, siendo uno de ellos algo parecido a una adicción.

Para todos aquellos que no visteis el programa, aquí os dejo el enlace.

Hubo cosas que estuvieron bien, pero otras que no (realmente daban vergüenza ajena), y por ello me gustaría ir repasando el programa y aclarando todo aquello que sea de especial interés, haciendo hincapié en los puntos más importantes.

Pero antes de empezar, me gustaría recalcar un par de cosas rápidas:

• La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomiendó que el consumo de azúcares libres no sobrepasase el 10% de la ingesta calórica total diaria, pero viendo los problemas de salud pública que acarrea su consumo (caries, sobrepeso, obesidad…), se reafirma en disminuir su consumo a menos del 5% de la ingesta calórica total diaria.

• Los azúcares libres son los monosacáridos (como la glucosa y la fructosa) y los disacáridos (como la sacarosa, «azúcar de mesa» para los amigos) que se añaden a los alimentos y bebidas, así como los azúcares que están presentes de forma natural en la miel, los jarabes, los zumos de frutas y los zumos concentrados de frutas. No se refiere a los azúcares de la leche, las verduras o las frutas, ya que no hay evidencia científica de que su consumo produzca efectos adversos.

 

Datos emitidos en el programa.

1. «Cada español consume de media 112 gramos de azúcar al día«.
2. «No sólo encontramos azúcar en los alimentos, sino también en otros productos como la pasta de dientes o el tabaco«.
3. «¿Alguna vez ha pensado que es adicto al dulce? Hay un test para averiguarlo».
4. «Ya existen más de 35 edulcorantes para sustituir al azúcar».
5. «¿Se puede eliminar el azúcar de nuestra dieta?
6. Carmen Gómez Candela, directora de la Unidad de Nutrición del Hospital La Paz: «La OMS aconseja un consumo de azúcar de alrededor de un 5% del total de las calorías. Realmente, el único motivo que alegan es un hecho conocido, que es su relación con la caries, y afortunadamente la caries es una enfermedad en descenso. El argumento está totalmente rebatido porque hay muchas otras metdidas que intervienen en la caries.» «El azúcar tiene una condición especial, que es un alimento, es un nutriente y un aditivo a la vez en los alimentos, hay pocos alimentos que tengan todas estas posibilidades. Esto no significa que yo esté teniendo esta conversación contigo para fomentar el consumo de azúcar, no, yo estoy aquí para intentar defender un consumo moderado y razonable de azúcar». 
7. Cuidado con el azúcar oculto en los alimentos.
8. «Comemos 10 veces más azúcar que hace 3 décadas».
9. «Hay más de 40 sinónimos de azúcar».
10. «Adictos o no, el consumo excesivo de azúcar tiene consecuencias para la salud. Los problemas comienzan en la infancia».
11. «¿Qué medidas se han tomado en España? La única que encontramos la ha puesto en marcha una cadena de supermercados».

Conclusiones.

1. Pensando en una persona cuya ingesta sea de unas 2500 Kcal, el consumo de azúcar rondaría el 18%. Si tenemos en cuenta las recomendaciones de la OMS de no superar el 5% de las calorías diarias en forma de azúcar, esta persona no debería de consumir más de 30g. Para un adulto sano normal no recomienda más de 25 gramos, lo equivalente a 6 terrones o 3 sobres de azúcar (lo mismo que contiene una lata de refresco). Además, hay que tener en cuenta a la familia que analizan en el programa para decir que un español consume de media 112 gramos de azúcar al día. No se puede generalizar, no todos comemos galletas, pizzas comerciales, zumos envasados o cereales para el desayuno (otra cosa que me repatea es que sólo se fijen en el consumo de azúcar y no en el resto de mierda que comen [y quitando «lo verde» de la paella…], en fin). Y ya que hay que individualizar, qué mejor que analizando mi propia ingesta de un día, por ejemplo de ayer domingo:

   

    

    
2. La mayoría de pastas de dientes tienen sorbitol en su composición, un azúcar alcohol que se encuentra de forma natural en las algas y en algunas frutas, pero que también forma parte de estos productos proporcionando mayor plasticidad, sabor dulce y mejor solubilidad. Por otra parte, el azúcar es el aditivo más común en el tabaco, representando en torno al 3% del peso de un cigarro. Cuando se enciende, los azúcares producen acetaldehído, una sustancia química que refuerza el efecto adictivo de la nicotina.
   

    

3. No es que seamos adictos al azúcar, es que somos adictos a la comida, comemos. Si tenemos en cuenta que cada vez se añade más y más azúcar a más y más alimentos de consumo diario, es normal que si te la quitan te cause una cierta dependencia. Azúcar desde los cereales del desayuno hasta el yogur con frutas de por la noche, pues ya me dirás. «España es el segundo país de Europa en el que más azúcar se consume. Cada español come 13 Kg de bollos, pasteles, galletas y cereales al mes».
   

    

4. Uno de los edulcorantes que más se usa hoy en dia es la sacarina, puramente química. Se elabora a partir de compuestos como el tolueno, y se utilizan otros como el amoniaco para su elaboración. Hay que decir que esto da algo de miedo, pero hay que tener en cuenta los controles rigurosos que pasa, y sobre todo que la EPA (Enviromental Protection Agency) la ha eliminado de la lista de sustancias peligrosas. Además, la EFSA (European Food Safety Authority) y la FDA (Food and Drug Administration) evalúan continuamente la seguridad de los edulcorantes, y en el Real Decreto 2002/1995 de 7 de Diciembre de 1995 también podemos encontrar una lista con los edulcorantes autorizados y sus condiciones de uso (entre los que se encuentra la sacarina), ya que no es libre, deben utilizarse en ciertas concentraciones. Debido a ello, a cada edulcorante se le asigna una IDA (Ingesta Diaria Admisible), que es la cantidad que puede consumirse a diario y durante toda la vida con la seguridad de que no va a ocasionar problemas para la salud. La IDA de la sacarina es de 5mg/Kg de peso corporal. La sacarina por tanto es un edulcorante artificial y hay que decir que es unas 300 veces más dulce que el azúcar y podemos encontrarla en bebidas gaseosas sin azúcar, en dulces, en chicles… así como en productos cosméticos y farmacéuticos. Por otro lado, tenemos los edulcorantes naturales como la miel o el sirope de ágave, pero últimamente se le está dando más protagonismo a la stevia, y así lo vimos en el programa. Es un edulcorante al que se le atribuyen varias propiedades beneficiosas, como que no es cariogénica, apenas tiene calorías, no provoca cambios en la glucemia (por lo que está indicada para las personas diabéticas), ayuda al control de la hipertensión y es resistente y estable al calor. No voy a dar muchos más datos, pero podéis leer en este post de Mi Dieta Cojea la puesta en duda de la naturalidad de la stevia. Como edulcorante que es también tiene una IDA, en este caso de 4mg/Kg de peso corporal y es unas 30 veces más endulzante que el azúcar.
   

    

5. SI, SI, Y MIL VECES SÍ. Basta con priorizar el consumo de alimentos frescos frente a los procesado, sobre todo el consumo de frutas, verduras y hortalizas frescas, carnes y pescados frescos, cereales integrales (pero integrales de verdad, como dice Lucía en su blog Dime Qué Comes), legumbres, frutos secos… Es cierto que la glucosa es el combustible que nuestras células necesitan para funcionar, pero podemos obtenerla a partir de muchísimos alimentos que contienen azúcares naturalmente presentes. La glucosa es imprescindible para la vida, el azúcar no lo es.
   

    

6. Esta mujer, contrariamente a lo que opinamos muchos o la mayoría de los nutricionistas, sí que fomenta el consumo (aunque sea moderado y responsable) de azúcar. Hombre, si los que le sueltan los billetes son los del IEDAR (Instituto de Estudios del Azúcar y la Remolacha), qué vamos a esperar que diga. Al menos, hay otros médicos como Jose Luís Cidón que no recomendarían el consumo de azúcar en la dieta (la consideran un auténtico veneno). «No contiene vitaminas, ni minerales, ni oligoelementos, es un oxidante, provoca irritabilidad y nerviosismo, no tiene nutrientes y aporta calorías vacías, es decir, que no sirven para nada, nuestro organismo las va a acumular en forma de grasa«.
   

    

7. En  este caso trata el azúcar de bebidas azucaradas comerciales, como pueden ser un refresco y una bebida energética. El refresco contiene unos 6 terrones de azúcar (lo máximo recomendado) mientras que una bebida energética llega a tener hasta 20 terrones de azúcar en medio litro. Jose Manuel López, profesor de bioquímica, nos expone que «el 68% de los adolescentes de toda la Unión Europea son consumidores habituales de este tipo de bebidas, y dentro de ese 68% prácticamente un 20% consume unos 7 litros semanales de bebidas energéticas. Además, aproximadamente un 18% de los niños entre 3 y 10 años son también consumidores de este tipo de bebidas. Cuando doy conferencias, mis alumnos no tienen problema en tomarse medio litro de bebida energética, pero sí los tienen cuando les propongo consumir 20 terrones de azúcar, ahí si que ven el riesgo para la salud«.
   

    

8. Comemos más azúcar, y lo hacemos más inconscientemente que hace 3 décadas. La industria alimentaria ha evolucionado, y tanto las propiedades del azúcar («endulza, acelera la fermentación del pan, favorece la formación de burbujas en los vinos espumosos y su poder antibacteriano lo hace inevitable en las conservas, también es indispensable en la elaboración de embutidos, es el aditivo estrella de la industria alimentaria«) como sus baratos costes la hacen de un producto fácil de usar e introducir en prácticamente todos los alimentos procesados. Encontramos azúcar en salsas como el kétchup o la salsa de soja, en cárnicos envasados como jamón york, pechuga de pavo y demás, en embutidos como chorizos, salchichones y sobrasadas, en cereales de desayuno, en panes, en galletas, en toda la bollería y pastelería, sopas instantáneas, zumos de frutas envasados, patatas fritas, aperitivos, postres lácteos y en muchos alimentos más. El 80% de los productos de supermercado tiene azúcar. El problema es que la gente no lo sabe, de ahí la importancia de leer el etiquetado de los alimentos, tanto la lista de ingredientes como la información nutricional del producto. «Creo que sólo voy a poder comer productos frescos y verduras. A la hora de hacer la compra se hace todo un mundo, porque es que estás muchísimo más tiempo mirando todas las etiquetas, y aparte que la comida biológica, sana, fresca y natural es carísima«.
   

    

9. El azúcar no se presenta tal cual en las etiquetas, sino que podemos encontrarla formulada de varias maneras, pero azúcar al fin y al cabo: sacarosa, fructosa, maltosa, jarabe de maíz, azúcar invertido, azúcar de caña, lactosa, dextrina, dextranos, jarabe de maíz alto fructosa, azúcar moreno, trehalosa, almidón, jarabe de glucosa, jarabe de fructosa, nectar de ágave, sirope de arce, miel, caramelo, cebada de malta, azúcar refinado, azúcar líquido invertido, jugo de fruta, sirope, azúcar de uva, maltodextrina, melaza, jarabe de arroz, azúcar, azúcar glas, jarabe líquido de glucosa… El problema es que los consumidores no saben si son azúcares añadidos o azúcares naturalmente presentes en los alimentos.
   

    

10. Actualmente, los niños consumen muchísimo mas azúcar que hace 20 o 30 años, hecho que podemos ver reflejado en la gran epidemia de obesidad infantil que azota nuestro país. Que no se debe únicamente al azúcar es evidente, otros factores como la inactividad física también entran en juego. Pero ya no es sólo la obesidad, sino la presencia cada vez más acusada de personas con diabetes tipo II (actualmente afecta a 1 de cada 10 españoles), una enfermedad que hasta ahora prácticamente sólo ha afectado a personas adultas, pero que ahora vemos también en niños y adolescentes. Además, el hecho de que el exceso de azúcar se convierta en grasa también pone otros órganos en peligro, como podría ser el corazón. «Las enfermedades provocadas por tomar azúcar en exceso suponen ya el 7% del gasto sanitario».
    
    
11. Una de las pocas medidas que se han implantado (y no en todos los sitios) para poder controlar un poco mejor lo que comemos es el semáforo nutricional. Es un sistema de colores que suele verse en la parte frontal de los envases que nos sirve para identificar visualmente si una ración de ese producto nos aporta un contenido alto (rojo), medio (amarillo) o bajo (verde) de calorías, azúcares, grasas, grasas saturadas y la sal (en ocasiones encontramos la fibra). Desde mi punto de vista es un sistema muy sencillo y visual y debería implantarse en todos los alimentos para facilitar al consumidor la elección de opciones más saludables a la hora de comprar; el problema es que hay mucho dinero y muchas empresas detrás a las que no les conviene la implantación de este tipo de sistemas en sus productos, ya que les perjudicaría. Otra medida que puede que también repercuta de forma positiva en la salud de la comunidad es la aplicación de impuestos sobre las bebidas azucaradas para disminuir su consumo, pero solo seis países en todo el mundo los han aplicado (y por supuesto, España NO es uno de ellos). Los responsables de este tipo de empresas se negaban en rotundo a aplicar esta subida de impuestos alegando que si otras empresas donde el azúcar también supone un riesgo para la salud no tenían que hacerlo, ellos tampoco.
    

     

 

EL AZÚCAR NO ES UN ALIMENTO INDISPENSABLE PARA EL

CORRECTO FUNCIONAMIENTO DEL ORGANISMO, TANTO ES ASÍ

QUE PODEMOS SINTETIZAR NUESTRA PROPIA GLUCOSA (EL AZÚCAR

DEL ORGANISMO). ES UN ALIMENTO QUE APORTA CALORÍAS VACÍAS

(400 Kcal/100g) Y NINGÚN OTRO BENEFICIO AL ORGANISMO.

EL COMBUSTIBLE QUE NECESITAMOS LO PODEMOS OBTENER DE 

LOS AZÚCARES NATURALMENTE PRESENTES EN ALIMENTOS COMO

FRUTAS, VERDURAS Y CEREALES INTEGRALES.

 

NO NECESITAMOS AZÚCAR PARA VIVIR.